Etiquetas
Adamastor, Ascensor da Bica, Café Royale, Casa do Ferreira das Tabuletas, Casa dos Bicos, Confeitaria Nacional, Fotografía, Lisboa, Mercado da Ribeira, Miradouro de Sata Catarina, Museu do Chiado, Noobai café, photography, Praça da Figueira, Praça do Comércio, Praça do Municipio, Teatro da Trinide, Teatro Nacional de San Carlos, viajes
El sábado era nuestro último día en Lisboa. Después de desayunar nos dirigimos al Chiado. Pasamos por delante del Teatro Nacional de San Carlos, de camino al Museu do Chiado.
El Museu do Chiado es una galería de arte contemporáneo (siglos XIX y XX), que se ubica en un antiguo convento. Lo más interesante del museo es el edificio en sí mismo y algunos cuadros y esculturas (originales de Rodin, Jorge Vieira o Tomas Costa y algún cuadro de artistas portugueses como Amadeo de Souza-Cardoso).
Esculturas y cuadros en el Museu do Chiado
Después de ver el museo, dimos un paseo hasta la Praça do Comércio, pasando antes por la Praça do Municipio. Nos acercamos hasta la Casa dos Bicos, pero tanto ésta como la Plaza del Comercio, estaban en obras.
Praça do Municipio y Praça do Comercio (detalle)
Continuamos nuestro recorrido por la Rua Augusta, la Rua de Santa Justa, la Rua da Prata (coincidimos con una procesión de la Virgen de Fátima) y paramos un momento en la Praça da Figueira, lugar de ocio de skaters, para entrar en la Confeitaria Nacional y hacer unas fotos de la plaza y del convento do Carmo.
Rua Augusta, elevador de Santa Justa y Praça da Figueira
Fuimos a comer al Café Royale y antes tomamos una cerveza junto al Teatro da Trinidade y la Casa do Ferreira das Tabuletas (con un impresionante trampantojo de azulejo).
Casa do Ferreira das Tabuletas y Teatro da Trinidade
Después de la comida bajamos hasta Cais do Sodré, vimos el Mercado da Ribeira (en el primer piso había un montón de gente de mediana edad bailando) y continuamos hasta el ascensor da Bica.
Mercado da Riberira
.
El ascensor nos dejó junto al Miradouro de Sata Catarina (o Adamastor) y aprovechamos para descansar y tomar un refresco en la terraza del café Noobai café, desde la que se disfruta de una buena vista al mar.
.
Terraza e interior del Noobai Café
El viaje tocaba ya a su fin, así que nos fuimos camino del hotel, pasando por la Rua da Rosa (en la que hay numerosas tiendas de ropa, cafés y restaurantes –como una especie de Malasaña o Fuencarral–) , la Rua de Dom Pedro V, etc., hasta llegar al hotel para coger las maletas rumbo al aeropuerto.
.
Sombrerería y pub en la Rua da Rosa
Seguro que no pasarán muchos meses hasta la próxima visita a Lisboa 🙂
Lo que no comentas es que el anciano se subió toda la cuesta del ascensor da Bica con la única ayuda del bastón.
Me tenia que haber comprado un sombrero.
Muacks
El anciano era un kamikaze (¿te acuerdas de cuando estaba parado pegado a los raíles y no se quiso separar?) 😀
Cuando volvamos, te compras un sombrero, que seguro que será pronto.
Muack,
A.