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El miércoles aproveché un momento libre que tuve por la tarde para acercarme a la nueva sede social de La Caixa, que, junto con el Thyssen y el Museo del Prado, forma parte de un conjunto cultural impresionante en el centro de Madrid (en el que también están el Real Jardín Botánico, la iglesia de Los Jerónimos y otros museos como el Naval).
El estudio de los arquitectos suizos Herzog & De Meuron ha diseñado el nuevo centro social y cultural CaixaForum-Madrid. Han aprovechado la fachada un antiguo edificio industrial (la Central Eléctrica del Mediodía, ejemplo de arquitectura industrial modernista, que abastecía a todo el sector sur del casco antiguo de Madrid) al que han añadido una parte superior de acero corten con perforaciones decorativas y en la parte inferior lo han hecho «levitar» sobre sus cimientos (han eliminado el zócalo de granito) utilizando tres enormes pilares y logrando, así, un espacio adicional de comunicación con el Paseo del Prado (integrado en la nueva plaza pública ubicada en la zona donde estaba una antigua gasolinera y cuyo elemento más característico es el primer jardín vertical de España, obra de Patrick Blanc).
Una de las medianeras que delimitan el espacio de CaixaForum se ha convertido en un jardín vertical: es un impresionante tapiz natural formado por 15.000 plantas de 250 especies, creado por Patrick Blanc. Es el más grande que se ha implantado, hasta la fecha, en una fachada sin huecos -tiene 460 m2- y actúa como agente medioambiental, aísla del ruido y protege la fachada de las inclemencias del tiempo. Aunque el pasado verano parecía que se secaba, parece ser que han solucionado los problemas y, en estos momento, el aspecto del tapiz vegetal es muy bueno.
Del interior del edificio hay dos elementos que destacan especialmente: la escalera de entrada y la escalera interior (con una estructura helicoidal impresionante). Las salas de exposición también me gustaron, la librería es pequeña y un poco incómoda en su distribución cuando hay mucha gente (que es casi siempre), el auditorio no lo he podido ver, y lo que menos me ha gustado es la cafetería (unas lámparas de techo muy chulas, pero un mobiliario muy cutre).
Actualmente está expuesta la Colección de Arte Contemporáneo de la Fundación Caixa y, en el exterior, esculturas de Igor Mitoraj.
AQUÍ tenéis una entrada del blog con más información.
Fernando dijo:
Que fotos mas chulas 🙂
Fito dijo:
Gracias. Tengo un montón más y no sabía cuáles poner.
Antonio Castillo Algarra dijo:
No mencionas en el conjunto al Reina Sofía y al museo más bonito de Madrid, el de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando…
Fito dijo:
Ni el Casón del Buen Retiro, ni el Museo Antropológico, …
Pingback: La plaza de Las Letras « Blog de Adolfo
Ethe dijo:
Hola Fito! Estando todavía en EU tuve la suerte de hacer una visita a las obras, la escalera ha quedado alucinante! En esa visita ví la estructura (cotilleé, pregunté y me explicaron), cómo está suspendido el edificio en unas «pedazo» de vigas hasta descolgarse en los 3 pilares dispuestos de manera asimétrica en planta, francamente interesante ese «levitar».
Tus fotos geniales, como siempre! La sala que no viste tiene un acabado espectacular. De la cafetería decirte, que a mí las lámparas me parecen un horror (sin comentarios a qué me recuerdan), de hecho desde mi modesta opinión, lo peor conseguido es la cafetería, pues con el acero corten de la fachada (que, en general me gusta, y es alucinante cómo consiguen el efecto «encaje» con ese chapón) se corta la pedazo de vista que había a esa altura (se veía hasta el Retiro), una penita.
Fin del 2º rollo de la abuela cebolleta
Fito dijo:
Pues sí, en lo de la cafetería tienes toda la razón. Además, da sensación de cafetería cutre cuando se han dejado unas pelas en el mobiliario.