• Berlín 2012
  • Berlín 2014
  • Nueva York 2011
  • Otra semana en Sicilia (2013)
  • Una semana en Sicilia

Blog de Adolfo

~ Música, viajes, ocio, cultura, tecnología, …

Blog de Adolfo

Archivos de etiqueta: Sicilia

Otra semana en Sicilia – Marzamemi, Módica, Ragusa y Catania

13 lunes Ene 2014

Posted by Fito in Arquitectura, Arte, Fotografía, Ocio y cultura, Viajes y ciudades

≈ 9 comentarios

Etiquetas

Catania, Marzamemi, Módica, Ragusa, Ragusa Ibla, Sicilia, Sicily, Travels, viajes

Una barca (servicio de un hotel) en el puerto de Marzamemi.

Una barca (servicio de un hotel) en el puerto de Marzamemi.

Agua Beach Resort

Agua Beach Resort

El miércoles, después de la visita a la zona arqueológica de Siracusa, nos pusimos rumbo a Marzamemi para disfrutar de unas horas de playa. Es una pena que no sacara la cámara del coche, pero os aseguro que merece la pena. Alquilamos una sombrilla y tumbonas en el Agua Beach Resort y aprovechamos para comer allí (había un servicio de bar/restaurante en la propia playa que estaba muy bien).

.

13_Sicilia_05_Mazarmemi_0002  13_Sicilia_05_Mazarmemi_0003

– La zona de alrededor del pequeño puerto de Marzamemi son terrazas y restaurantes para los turistas, pero los edificios antiguos mantienen el encanto del lugar.

Antes de proseguir nuestro viaje hasta Módica, hicimos una muy corta parada en el pueblecito de Marzamemi (tan corta, que fui el único que bajó del coche) y aproveché para hacer alguna foto (todas son de la zona de alrededor del puerto).

Vista de Módica, con la iglesia de y sus escalinatas en el centro.

Vista de Módica, con la iglesia de San Giorgio y sus escalinatas en el centro.

Iglesia de San Domenico.

Iglesia de San Domenico.

Módica es, junto a Ragusa o Noto, uno de los pueblos que hay que visitar de la Sicilia oriental. Hay que tener buenas piernas (desde que se baja del coche, uno no para de subir y bajar escaleras), pero las iglesias y las vistas merecen la pena. ¡Ah, y que no me olvide del chocolate!

Comenzamos la visita en el corso Umberto I (aparcamos cerca del palazzo San Domenico) y la primera parada fue en la chiesa di San Pietro. Se accede a la catedral por una escalinata adornada con las imágenes de los doce apóstoles. Su interior –tres naves separadas por doce columnas– es espléndido, como casi todas las iglesias sicilianas (siempre me sorprenden los altares y retablos barrocos hasta la extenuación y los preciosos órganos que tienen la mayoría de estas iglesias).

13_Sicilia_06_Modica_0006  13_Sicilia_06_Modica_0007

– Altar y órgano de San Pietro.

Fachada de San Pietro y escalinatas de acceso .

Fachada de San Pietro y escalinatas de acceso.

Retablo de San Giorgio.

Retablo de San Giorgio.

Después de ver San Pietro pasamos por delante del Teatro Garibaldi y comenzamos el ascenso hasta San Giorgio, donde estaban celebrando una boda, por unas preciosas callejuelas. La antigua iglesia del siglo XI fue destruida en el terremoto de 1613, se reconstruyó y volvió a ser restaurada después del seísmo de 1693. La escalinata de acceso, la fachada y el interior de cinco naves son dignos de ver (la fachada, con su torre, está presente en cualquier foto que se haga desde los miradores que están a las afueras de la ciudad).

Al salir de la iglesia, hicimos algunas fotos de las espectaculares vistas y bajamos por otras callejuelas hasta Santa Maria di Betlem –un edificio del siglo XV, que fue reformado en varias ocasiones–, una de las iglesias más importantes de Módica.

.

En Módica cualquier rincón es especial (esta foto la hice en el camino de ascenso hacia San Giorgio).

En Módica cualquier rincón es especial (esta foto la hice en el camino de ascenso hacia San Giorgio).

13_Sicilia_06_Modica_0015  13_Sicilia_06_Modica_0018

– Iglesia de San Giorgio: Vista de la torre de la fachada y del interior.

13_Sicilia_06_Modica_0019  13_Sicilia_06_Modica_0020

– Iglesia de San Giorgio: La novia subiendo las escalinatas y vista de Módica con la iglesia a la derecha.

Santa Maria di Betlem.

Santa Maria di Betlem.

Como estábamos cansados y ya casi sin tiempo, nos sentamos en una terracita frente a la iglesia a tomar unas cervezas y después cruzamos la calle para comprar chocolate en La Dolce Contea, una de las muchas tiendas que venden este típico producto de la zona.

 13_Sicilia_06_Modica_0002   13_Sicilia_06_Modica_0031

Un precioso balcón de un edificio de Módica, en la via Umberto I.

Un precioso balcón de un edificio de Módica, en la via Umberto I.

Ragusa.

Ragusa.

Cogimos de nuevo el coche para ir a Ragusa, otra de las ciudades barrocas de la Sicilia oriental que son de visita obligada. Reservamos en el hotel Montreal, y fue todo un acierto: muy bien situado en la Ragusa superior (muy cerca de las escaleras de bajada a la Ragusa Ibla), con unas habitaciones limpias y amplias, con parking y muy barato.

Como ya era muy tarde, decidimos ir a cenar y dejar la visita cultural para la mañana siguiente. Pero tuvimos la mala idea de ir andando hasta el restaurante, que estaba en la Ragusa Ibla. Hay casi 250 peldaños dispuestos de la manera más incómoda posible y que después ¡¡hay que volver a subir!!

Aún así, ver Ragusa Ibla por la noche, toda iluminada, merece la pena. Cenamos en Il Barocco, un restaurante agradable, en el que se come bastante bien y muy barato. Después volvimos al hotel, pero de la subida de las escaleritas prefiero no decir nada.

Vista nocturna de Ragusa Ibla.

Vista nocturna de Ragusa Ibla.

13_Sicilia_07_Ragusa_0004  13_Sicilia_07_Ragusa_0005

– Fachada de la iglesia del Purgatorio y Cristina y Fernando disfrutando de la cena en Il Baroco.

Por la mañana, y con el coche, bajamos hasta Ragusa Ibla y comenzamos la visita (tras el seísmo de 1693, Ragusa Ibla se reedificó, pero quedó apartada del crecimiento y de la actividad de la Ragusa superior, el nuevo asentamiento levantado tras el terremoto). Merece la pena hacer un paseo completo por la pequeña ciudad, empezando por la iglesia del Purgatorio (está en la piazza della Repubblica, junto al palacio Cosentini, el palacio de la Cancelleria y la iglesia de Santa Maria dell’Idria), la catedral de San Giorgio y terminando en el Jardín Ibleo.

Vista de Ragusa Ibla, con la torre de la iglesia de en primer plano.

Vista de Ragusa Ibla, con la torre de la iglesia de Santa Maria dell’Idria en primer plano.

La catedral de San Giorgio (1738-1775) está en la parte más elevada de la piazza del Duomo. Es una de las mejores muestras del barroco siciliano, y su arquitecto fue Rosario Gagliardi.

Catedral de San Giorgio.

Catedral de San Giorgio.

13_Sicilia_07_Ragusa_0019  13_Sicilia_07_Ragusa_0020

– Interior de San Giorgio.

Imagen de la Inmaculada, junto al altar de San Giorgio.

Imagen de la Inmaculada, junto al altar de San Giorgio.

Circolo di Conversazione.

Circolo di Conversazione.

Iglesia de

Iglesia de San Giuseppe.

Descendiendo desde la catedral, nos encontramos a la izquierda con la fachada neoclásica del club privado Circolo de Conversazione (construido en 1850 por los nobles de Ragusa para cultivar el placer de la charla) y con el palacio Donnafugata.

Enseguida llegamos a la piazza Pola, presidida por la iglesia de San Giuseppe, de planta elíptica. Y desde allí seguimos bajando hasta llegar a la piazza Odierna, donde comienza el jardín Ibleo. Antes, nos acercamos a ver el pórtico de San Giorgio Vecchio, lo único que queda en pie de la iglesia normanda de San Giorgio, destruida por el terremoto.

 

13_Sicilia_07_Ragusa_0024  13_Sicilia_07_Ragusa_0026

– Interior de la iglesia de San Giuseppe.

Entrada al jardín Ibleo. A la izquierda, iglesia.

Entrada al jardín Ibleo. A la izquierda, iglesia de San Domenico.

El jardín Ibleo es un lugar fantástico para pasear y descansar un rato. A su entrada está la iglesia de San Domenico, y ya en el interior la de San Giacomo (del siglo XIV) y el convento de los capuchinos.

13_Sicilia_07_Ragusa_0030  13_Sicilia_07_Ragusa_0032

– Jardín Ibleo.

13_Sicilia_07_Ragusa_0031  13_Sicilia_07_Ragusa_0034

– Iglesia de San Giacomo, en el jardín Ibleo, y pórtico de San Giorgio Vecchio.

Trattoria La Pagglia.

Trattoria La Paglia.

En el jardín terminó visita a Ragusa. Era ya el último día del viaje y cogimos el coche para volver a Catania, una de mis ciudades preferidas de Sicilia que, en este viaje, redescubrimos. Llegamos con el tiempo justo para comer y decidimos acercarnos a la Trattoria La Paglia (via Pardo, 23, en el mercado del pescado), a la que ya habíamos ido el anterior viaje. Después fuimos a descansar al hotel. Por la tarde, dimos un buen paseo por la ciudad, vimos tiendas curiosas de las que ya no quedan en las grandes ciudades y paramos a tomarnos unas cervezas en Da Vicenzo, en la agradable piazza Mazzini.

Fachada lateral de un cine de Catania.

Fachada lateral de un cine de Catania.

13_Sicilia_08_Catania_0004  13_Sicilia_08_Catania_0010

– Tienda de café, con la tostadora en funcionamiento, y tienda de alimentación.

13_Sicilia_08_Catania_0005  13_Sicilia_08_Catania_0008

– Paseando por Catania.

13_Sicilia_08_Catania_0013

Cristina y Fernando en Da Vicenzo.

Por la noche cenamos en un coqueto patio interior ajardinado: Al Cortile Alessi es una pizzería que está casi escondida en via Alessi y que merece la pena visitar (por el local y por la comida).

Después de la cena dimos otro agradable paseo por Catania hasta el hotel. Era nuestra última noche en Sicilia. Por la mañana devolvimos el coche en el aeropuerto y cogimos nuestro vuelo a Madrid.

¿Volveremos a Sicilia este 2014? ¡No será por falta de ganas!

.

.

13_Sicilia_08_Catania_0016  13_Sicilia_08_Catania_0017

– Via Alessi y patio interior de la pizzería Al Cortile Alessi.

Palazzo Centrale (Universidad), en la piazza Università.

Palazzo Centrale (Universidad), en la piazza Università.

Comparte esta entrada:

  • Twitter
  • Facebook

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

Otra semana en Sicilia – Siracusa

10 martes Sep 2013

Posted by Fito in Arquitectura, Arte, Fotografía, Ocio y cultura, Viajes y ciudades

≈ 6 comentarios

Etiquetas

Arte, ciudades, Fotografía, Italia, Ortigia, photography, Sicilia, Siracusa, Travels, Turismo, viajes

Vista aérea de la isla de Ortigia (Siracusa), con algunos puntos de interés.

Vista aérea de la isla de Ortigia (Siracusa), con algunos puntos de interés.

Teatro Greco.

Teatro Greco.

El martes por la mañana emprendimos viaje en coche desde Palermo hasta Siracusa. Aunque ya habíamos estado en Ortigia (la pequeña isla donde se originó la ciudad), Siracusa es de esas ciudades que a las que uno siempre está deseando volver. Como la experiencia anterior había sido muy buena, volvimos al mismo hotel, el Gutkowski.

Después de dejar las maletas en la habitación, nos fuimos a dar un paseo por la isla antes de ir a comer. Pasamos por el Teatro Greco, la iglesia del Collegio dei Gesuiti y la piazza Archimede, hasta llegar a Al Ficodindia (via M. Arezzo, 7), donde comimos buena pasta y a muy buen precio.

13_Sicilia_04_Siracusa_0002  13_Sicilia_04_Siracusa_0004

– Entrada a la iglesia del Collegio dei Gesuiti y entrada al palacio Beneventano del Bosco.

Tras la comida, decidimos hacer un recorrido por la isla y dejar el descanso para antes de la cena. Así, visitamos primero la blanquísima y preciosa plaza de la catedral, en la que están, entre otros edificios de importancia, la catedral, el Ayuntamiento, el palacio Beneventano del Bosco y la iglesia Santa Lucia alla Badia.

13_Sicilia_04_Siracusa_0003  13_Sicilia_04_Siracusa_0005

– Exterior y patio interior del palacio Beneventano del Bosco.

El palacio Beneventano del Bosco fue sede de la orden de los Caballeros de Malta, fundada en Siracusa en el siglo XVII.

13_Sicilia_04_Siracusa_0007

Catedral de Siracusa.

13_Sicilia_04_Siracusa_0010  13_Sicilia_04_Siracusa_0012

– Nave central de la catedral, normanda, cubierta con artesonado de madera de época renacentista. A la derecha, la capilla del Sacramento, obra de Giovanni Vermexio.

La catedral es producto de la superposición a través de los siglos. Su origen es el templo de Atenea, del s. V aC., del que se conserva parte en el interior del edificio cristiano que lo envuelve. En el siglo VII fue transformado en basílica cristiana y sufrió remodelaciones en época normanda y posteriormente hasta principios del s. XVIII.

Santa Lucia alla Badia.

Santa Lucia alla Badia.

Por el sur de la plaza, por la via Picherali, se accede a la fuente Aretusa, desde donde se ve la zona del puerto. La fuente es un manantial de agua dulce pegado al mar, que está lleno de papiros. Por detrás de la fuente está el acuario, un pequeño jardín y una pequeña playa urbana.

Vista de la fuente Aretusa, junto al mar, con los papiros en el centro.

Vista de la fuente Aretusa, junto al mar, con los papiros en el centro.

13_Sicilia_04_Siracusa_0019  13_Sicilia_04_Siracusa_0020

– Vista del paseo Lungomare Alfeo y playa urbana junto a la fuente Aretusa.

Detalle del interior del Palacio Bellomo.

Detalle del interior del Palacio Bellomo.

Desde la fuente Aretusa, cogiendo la via Capodieci, llegamos hasta el palacio Bellomo, sede de la Galería Regional. Allí pudimos ver esculturas, escudos y, sobre todo, La Anunciación (de Antonello de Messina) y El Entierro de Santa Lucía (de Caravaggio).

Tras la visita al museo, entramos en la iglesia de San Martino (el gótico catalán de la fachada esconde la basílica paleocristiana del interior (s. VI)). Después fuimos hasta el castillo Maniace (lo podéis ver en la crónica de la anterior visita a Sicilia, ya que en esta ocasión estaba cerrado) y, desde allí, emprendimos camino al hotel por el lungomare d’Ortigia (pasamos por delante de la iglesia del Espíritu Santo y también aproveché para hacer una foto parecida a una del viaje anterior: en aquella ocasión había sido una niña asomada a una ventana de una planta baja y, en esta, fue una chica recostada en el marco del balcón de una casa del paseo marítimo).

Patio interior del palacio Bellomo.

Patio interior del palacio Bellomo.

13_Sicilia_04_Siracusa_0027  13_Sicilia_04_Siracusa_0030

– Interior de la iglesia de San Martino y callejuela de Ortigia.

13_Sicilia_04_Siracusa_0032

Detalle de la fachada de la chiesa dello Spirito Santo.

Tarde de verano en Ortigia.

Tarde de verano en Ortigia.

Al llegar al hotel, aprovechamos que había granizados gratis en la terraza y descansamos allí un buen rato. Y ya por la noche, fuimos hasta la piazza Federico di Svevia, donde está la Taverna Sveva. Ya habíamos ido en nuestro anterior viaje y pudimos comprobar que la comida sigue estando igual de rica y su terraza igual de agradable.

El miércoles por la mañana, después de desayunar en el hotel, pusimos rumbo a una playa al lado del pueblecito de Marzamemi, pero antes hicimos una parada en el Parque Arqueológico de Siracusa.

Vista general del Teatro Griego de Siracusa.

Vista general del Teatro Griego de Siracusa.

Allí pudimos disfrutar del impresionante teatro griego, cuyo origen es del s. V aC., y de la Latomía del Paraíso (canteras de piedra calcárea de la época clásica). Destaca especialmente la Oreja de Dionisio, una gruta llamada así por Caravaggio debido a su forma. También paseamos por el jardín que une la entrada a otras grutas y visitamos el anfiteatro romano (s. III dC.) que está justo a la salida del recinto.

13_Sicilia_04_Siracusa_0038  13_Sicilia_04_Siracusa_0039

– Otra vista del Teatro Griego (con Cristina y Fernando) y una fuente natural a espaldas del teatro.

13_Sicilia_04_Siracusa_0043  13_Sicilia_04_Siracusa_0049

– Latomía del Paraíso y una de las grutas.

La Oreja de Dionisio.

La Oreja de Dionisio.

13_Sicilia_04_Siracusa_0048  13_Sicilia_04_Siracusa_0047

– Entrada e interior de la Oreja de Dionisio.

Anfiteatro romano, a la entrada del Parco Archeologico della Neapolis.

Anfiteatro romano, a la entrada del Parco Archeologico della Neapolis.

En la próxima entrada podréis leer la crónica del resto del viaje: Marzamemi, Módica, Ragusa y la última noche en Catania, que pondría punto final a este fantástico viaje.

Comparte esta entrada:

  • Twitter
  • Facebook

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

Otra semana en Sicilia – Palermo (segundo día)

02 lunes Sep 2013

Posted by Fito in Arquitectura, Arte, Fotografía, Ocio y cultura, Viajes y ciudades

≈ 5 comentarios

Etiquetas

ciudades, Fotografía, Mondello, Palermo, photography, Sicilia, Sicily, Travels, viajes

Vista frontal del Teatro Massimo de Palermo, con las famosas escalinatas de El Padrino III.

Vista frontal del Teatro Massimo de Palermo, con las famosas escalinatas de El Padrino III.

Non disturbare il conducente.

Non disturbare il conducente.

El lunes, después de desayunar en el hotel, nos acercamos andando hasta el Teatro Massimo (diseñado en 1875 por Giovanni Battista Basile y su hijo, y famoso, entre otras razones, porque en su escalinata de entrada se desarrollan las últimas escenas de El Padrino III). Frente al teatro para el autobús para ir hasta el Palacio de los Normandos y la capilla Palatina. Mientras esperábamos el bus, tuvimos tiempo suficiente para escribir nuestras memorias (y menos mal que nos avisaron de que el ticket hay que comprarlo en los kioscos). NOTA: Ampliad la foto del bus, que tiene su gracia.

Otra vista del Teatro Massimo de Palermo.

Otra vista del Teatro Massimo de Palermo.

Entrada a la capilla Palatina.

Entrada a la capilla Palatina.

Una de las visitas imprescindibles en Palermo es el palacio Real y la capilla Palatina. El palacio de los Normandos es la actual sede de la Asamblea Regional siciliana. El edificio se asienta sobre una fortaleza púnica. Los emires musulmanes levantaron sobre ella su residencia, pero los reyes normandos fueron los que definitivamente ampliaron y embellecieron el edificio. La capilla Palatina fue erigida por Roger II entre 1130 y 1140. La maravilla de artesonado es de 1143 y está formado por mocárabes pintados con representaciones de la vida y corte en el desierto, de inspiración persa. Pero lo que deslumbra al visitante son los mosaicos, recubiertos de láminas de oro y ejecutados en 1140 y en 1170.

La capilla Palatina es, como podéis ver, una de las visitas obligadas en Palermo.

La capilla Palatina es, como podéis ver, una de las visitas obligadas en Palermo.

13_Sicilia_03_Palermo_0040  13_Sicilia_03_Palermo_0042

– Detalles de la capilla Palatina, en el Palacio de los Normandos (Palermo).

Después de ver la capilla, recorrimos el resto de salas del palacio que se podían visitar (apartamentos reales) y, tras finalizar la visita, nos dirigimos al Mercato delle Pulci, donde venden antigüedades.

13_Sicilia_03_Palermo_0043  13_Sicilia_03_Palermo_0044

– Tiendecitas de antigüedades en el Mercato delle Pulci.

Seguimos el paseo por la via Vittorio Emanuele hasta la Catedral, cuyo curioso aspecto se debe a que tiene partes de todos los siglos (desde el origen bizantino hasta las últimas obras en el siglo XIX).

13_Sicilia_03_Palermo_0045  13_Sicilia_03_Palermo_0047

– Catedral de Palermo.

Vista general del interior de la catedral de Palermo.

Vista general del interior de la catedral de Palermo.

13_Sicilia_03_Palermo_0048  13_Sicilia_03_Palermo_0051

– Detalle del altar y frescos de la catedral y exterior (estatua de Santa Rosalía).

Vimos también en nuestro recorrido algún patio, la piazza Bologni (rodeada de palacios) y, finalmente, paramos en el convento de Santa Caterina para comprar una entrada para visitar su iglesia y la del Gesù (Casa Professa).

Piazza Bologni, en la via Vittorio Emanuele.

Piazza Bologni, en la via Vittorio Emanuele.

Un precioso patio de una casa de la via Vittorio Emanuele, muy cerca de la Catedral.

Un precioso patio de una casa de la via Vittorio Emanuele, muy cerca de la Catedral.

La iglesia del Gesù (de los jesuitas), en la piazza di Casa Professa, es el barroco llevado al paroxismo. Fue iniciada en 1564 y, por desgracia, los bombardeos de 1943 dañaron especialmente las bóvedas (las pinturas actuales son horribles). La iglesia tiene también una cripta y una capilla en el piso superior.

13_Sicilia_03_Palermo_0054  13_Sicilia_03_Palermo_0055

– Exterior y recargadísimo interior de la iglesia del Gesù.

Detalle del interior de la iglesia del Gesù.

Detalle del interior de la iglesia del Gesù.

La iglesia de Santa Caterina, en la piazza Bellini, no se queda atrás en cuanto a su decoración barroca. Se construyó entre 1580 y 1596, y su interior está cubierto de mármoles de colores, pinturas, altares, estucos y estatuas. Aparte de la iglesia, se puede visitar un pequeño museo de arte sacro y los claustros.

Detalle de un fresco de Santa Caterina.

Detalle de un fresco de Santa Caterina.

13_Sicilia_03_Palermo_0062  13_Sicilia_03_Palermo_0064

– Cúpula y altar de Santa Caterina.

13_Sicilia_03_Palermo_0066  13_Sicilia_03_Palermo_0067

– Vista general del interior de la iglesia de Santa Caterina y detalle de la decoración de una de las columnas.

Tras las que iban a ser las últimas visitas culturales en Palermo, nos dirigimos al mercado de la Vucciria, para verlo y, de paso, comer algo por la zona. Quizá porque era ya tarde (y además lunes), el mercado tenía muy pocos puestos y no había nada de ambiente por las calles. Para colmo, casi todos los restaurantes que íbamos mirando en las dos guías estaban cerrados o ya no existían. Al final, ya casi exhaustos, terminamos en el barrio de la Kalsa, detrás de la piazza Marina, en un restaurante que fue un buen descubrimiento. Sikilia, en via Alloro, 22, es un pequeño restaurante de comida siciliana con un toque de cocina creativa. Todo estaba riquísimo y el precio acorde a lo que ofrecen.

Mercado de la Vucciria.

Mercado de la Vucciria.

Del restaurante nos fuimos, andando, hasta el hotel. Y en ese trayecto, en la Kalsa, hice una de las fotos que más me gusta: un chico y una chica sentados en cajas de bebidas, charlando bajo la sombra del único árbol de la zona y, como telón de fondo, unas casas ruinosas decoradas con graffiti. La Kalsa fue el corazón cultural e intelectual de Palermo. El nombre es de origen árabe, (khalisa quiere decir “pura”) y se trata de uno de los barrios más antiguos de Palermo, rico en monumentos y edificios. Devastado durante los bombardeos de la segunda guerra mundial, está volviendo lentamente a renacer gracias a proyectos de restauración y recuperación urbana e iniciativas culturales.

Hasta en las zonas más abandonadas de la Kalsa se puede encontrar cierta belleza.

Hasta en las zonas más abandonadas de la Kalsa se puede encontrar cierta belleza.

Después de un breve descanso en el hotel, cogimos el coche y pusimos rumbo a Mondello, la zona de playa de los palermitanos, que merece la pena ver (y disfrutar) una tarde. Aunque no llevé la cámara, merece la pena admirar la playa y el edificio del balneario Kuursal, que se adentra en el mar y sirve de recuerdo de lo que fue Mondello en otra época. Os dejo una de las fotos que he encontrado en internet.

Foto de la playa de Mondello y del balneario Kuursal (la playa, en realidad, está llena de tumbonas y sombrillas de pago).

Foto de la playa de Mondello y del balneario Kuursal (la playa, en realidad, está llena de tumbonas y sombrillas de pago).

Y tras la tarde de playa, sólo quedaba regresar a Palermo, darse una buena ducha en el hotel e ir a cenar. En esta ocasión fuimos a la Casa del Brodo, una excelente trattoria (via Vittorio Emanuele, 175) frecuentada por personajes famosos y con una cocina excelente (los espaguetis vongole estaban exquisitos y el pez espada no se quedaba atrás).

Aquí termina la crónica de la visita a Palermo. El martes emprenderíamos viaje a Siracusa, pero eso será parte de la próxima crónica.

Comparte esta entrada:

  • Twitter
  • Facebook

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

Otra semana en Sicilia – Palermo (primer día)

31 sábado Ago 2013

Posted by Fito in Arquitectura, Arte, Fotografía, Ocio y cultura, Viajes y ciudades

≈ 3 comentarios

Etiquetas

Arte, ciudades, Fotografía, Italia, Palermo, photography, Sicilia, Sicily, Travels, Turismo, viajes

Plano de Palermo. Están marcadas algunas vías principales y lugares de interés que comento en el texto.

Plano de Palermo. Están marcadas algunas vías principales y lugares de interés que comento en el texto.

El domingo, a primera hora de la mañana, nos pusimos camino de Palermo. Sabíamos que quizá eran los dos peores días para ver la ciudad, pero en algún sitio tenían que coincidir.

Iglesia de San Domenico, en la plaza presidida por la columna de la Inmaculada.

Iglesia de San Domenico, en la plaza presidida por la columna de la Inmaculada.

Iglesia de San Antonio, en via Roma.

Iglesia de San Antonio, en via Roma.

Llegamos al hotel Mercure (está bastante bien y muy céntrico), dejamos las maletas en la habitación y nos fuimos a dar un paseo por via Roma (pasamos por la iglesia de San Domenico –y otras que ahora no recuerdo–) y via Vittorio Emmanuele hasta la piazza San Francesco, ya que íbamos a comer a la Antica Focacceria San Francesco. El local, con horno y mesas de mármol y una estupenda terraza frente a San Francisco de Asís (excepto por el insoportable calor que hacía en Palermo a mediodía), se inauguró en 1834 y sirve, a muy buen precio, especialidades palermitanas (para comer allí o para llevar).

13_Sicilia_03_Palermo_0004  13_Sicilia_03_Palermo_0005

– La Antica Focacceria S. Francesco, con su terraza frente a la iglesia de San Francisco de Asís.

Oratorio de San Lorenzo

Oratorio de San Lorenzo

Después de comer, y de sudar como pollos, continuamos la visita con una parada en el precioso Oratorio de San Lorenzo, una auténtica joya del rococó siciliano de 1569 (los espectaculares relieves son de finales del 1600). La anécdota, por decirlo de alguna manera, es que el altar estaba presidido por una Natividad obra de Caravaggio, pero lo que hay actualmente es una fotografía del cuadro original, ya que fue robado en 1969 y no se volvió a saber nada de su paradero.

Vista general del Oratorio de San Lorenzo.

Vista general del Oratorio de San Lorenzo.

Detalle de los relieves del Oratorio de San Lorenzo.

Detalle de los relieves del Oratorio de San Lorenzo.

Seguimos nuestro recorrido por Vittorio Emmanuele, haciendo una parada en la iglesia de San Matteo. La iglesia, de 1663, es muy bonita (la cúpula fue pintada al fresco por Vito d’Anna en 1756), pero necesita urgentemente una restauración.

13_Sicilia_03_Palermo_0009  13_Sicilia_03_Palermo_0010

– Interior y detalle de los frescos de la iglesia de San Matteo.

Después de ver San Matteo nos acercamos hasta la plaza Pretoria (allí está el Ayuntamiento). En medio de la plaza destaca la enorme fontana Pretoria, de 1554, de cuyas esculturas de desnudos masculinos cuentan que sufrieron las iras de monjas del vecindario.

13_Sicilia_03_Palermo_0011  13_Sicilia_03_Palermo_0012

– Fontana Pretoria, en la plaza del mismo nombre.

Fachada de Santa Caterina, en la piazza Bellini.

Fachada de Santa Caterina, en la piazza Bellini.

Saliendo por un lateral de la plaza está la piazza Bellini, rodeada por tres iglesias: Santa Caterina (veríamos su interior barroco el lunes) y las iglesias normandas de La Martorana y San Cataldo. Sobre la nave central de San Cataldo se elevan tres cúpulas (lo que la hacen especialmente singular al verla desde el exterior) y el mosaico del pavimento es el original.

Iglesias normandas de La Martorana y San Cataldo, en la piazza Bellini.

Iglesias normandas de La Martorana y San Cataldo, en la piazza Bellini.

13_Sicilia_03_Palermo_0019  13_Sicilia_03_Palermo_0020

– Interior de la iglesia normanda de San Cataldo, en la piazza Bellini.

Fachada cóncava de Quatro Canti.

Fachada de Quattro Canti.

Nos acercamos después al cruce de Quattro Canti (el centro histórico de Palermo), cuya escenografía barroca, en tres niveles, de las fachadas cóncavas de cuatro palacios fue proyectada en 1608 por Giulio Lasso. Y desde allí nos dirigimos por Vittorio Emmanuele hasta la piazza Marina, donde está el jardín Garibaldi, la iglesia de Santa Maria dei Mirácoli, el Palazzo Galletti o el Palacio Chiaramonte (actual sede del Rectorado de la Universidad).

Quattro Canti: cruce de via Maqueda y via Vittorio Emmanuele.

Quattro Canti: cruce de via Maqueda y via Vittorio Emmanuele.

La sencilla iglesia de Santa Maria dei Mirácoli, en la piazza Marina.

La sencilla iglesia de Santa Maria dei Mirácoli, en la piazza Marina.

Los siempre espectaculares balcones de Sicilia, en esta ocasión en un palacio cercano a la piazza Marina.

Los siempre espectaculares balcones de Sicilia, en esta ocasión en un edificio cercano a la piazza Marina.

El recorrido iba a terminar frente al mar, en las terrazas del Foro Itálico. Más concretamente en Ilardo (Foro Umberto, 11), una heladería excelente (recomendada en la guía de Reyero) en la que disfrutamos de unos granizados naturales de limón y fresa.

13_Sicilia_03_Palermo_0026  13_Sicilia_03_Palermo_0029

– Cristina, Fernando y yo en la terraza de Ilardo, esperando nuestros granizados.

Chiesa della Pietà, de estilo barroco. Construida por Giacomo Amato (1681). Está en via Torremuza, 1 (detrás del paseo del Foro Itálico).

Chiesa della Pietà, de estilo barroco. Construida por Giacomo Amato (1681). Está en via Torremuza, 1 (detrás del paseo del Foro Itálico).

Ya al atardecer, volvimos al hotel pasando por Porta Felice, la iglesia de Santa Maria della Catena (de estilo gótico catalán de finales del XV) y por una plaza con un monumento a los caídos en la lucha contra la Mafia.

Santa Maria della Catena, de estilo gótico catalán (finales del s. XV).

Santa Maria della Catena, de estilo gótico catalán (finales del s. XV).

Y después de descansar un rato, fuimos a cenar unas pizzas riquísimas (y muy baratas) en La Taverna di John (via Sperlinga, 57). Tras la cena, nos tomamos unos helados en Spinnato, un antiguo café con terraza (via Principe di Belmonte, 111) que está en una zona cercana al hotel, llena de terrazas y pubs, en el barrio de Politeana.

Así terminaba nuestro primer día en Palermo. El lunes por la mañana lo íbamos a dedicar a ver muchos de los edificios, mercados, iglesias, palacios y monumentos que no habíamos podido ver el domingo. La tarde estaba reservada para la la playa (Mondello).

Monumento a los caídos en la lucha contra la Mafia.

Monumento a los caídos en la lucha contra la Mafia.

Comparte esta entrada:

  • Twitter
  • Facebook

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

Otra semana en Sicilia – Taormina y Catania (Parte 2)

08 jueves Ago 2013

Posted by Fito in Arquitectura, Arte, Fotografía, Ocio y cultura, Viajes y ciudades

≈ 6 comentarios

Etiquetas

Arte, Catania, ciudades, Fotografía, Italia, photography, Sicilia, Taormina, Travels, vacaciones, viajes

Plano de Taormina. Está marcada la via Umberto I y el recorrido del funicular, así como algunos de los lugares que comento en el texto.

Plano de Taormina. Está marcada la via Umberto I y el recorrido del funicular, así como algunos de los lugares que comento en el texto.

Ocio en Taormina: ballet, ópera y funerales (increíble que se anuncien así).

Ocio en Taormina: ballet, ópera y funerales (increíble que se anuncien así).

El sábado por la mañana cogimos el coche para ir de Catania a Taormina (tal y como teníamos organizado el viaje, no teníamos otra opción, pero ir un sábado a Taormina significa ver la ciudad entre un enjambre de turistas). Lo mejor, tras haber pasado el susto de la sinuosa carretera de acceso, en la que los autobuses se tienen que parar en numerosas ocasiones porque literalmente no son capaces de girar con otro vehículo enfrente, es dejar el corche en el aparcamiento Lumbi. Después, uno tiene dos opciones: hacer cola para un bus gratuito que va al centro, o subir unas 200 escaleras. Nosotros subimos las escaleras y merece la pena (no son complicadas como las de Ragusa y, una vez subidas, estás ya en el centro).

Como se puede leer en la magnífica guía de Reyero (no me cansaré de recomendarla, aunque se ha quedado muy desfasada en lo referente a hoteles y restaurantes), Taormina es, en palabras de Guy de Maupassant, sólo un paisaje, «pero es un paisaje que resume en sí todo lo que hay en la tierra capaz de atraer la vista, la imaginación y el espíritu». Y no hay mejor sitio que el Teatro Griego para comprobar que Maupassant no se equivocaba.

Vista de Taormina desde el Teatro Griego. Al fondo, el Etna.

Vista de Taormina desde el Teatro Griego. Al fondo, el Etna.

Empezamos nuestra visita a Taormina, efectivamente, por el Teatro Griego (aunque lo que se puede ver actualmente es un teatro romano (el griego se reedificó en el siglo II aC). El teatro es magnífico y está muy bien conservado –unos días después de nuestra visita iba a actuar Patti Smith–, pero lo que merece más la pena es disfrutar de las vistas de la ciudad y la costa.

Taormina_0003  Taormina_0012

– Dos vistas del Teatro Griego de Taormina.

Tan espectacular como el propio Teatro Griego son las vistas de Taormina, la costa y el Etna.

Tan espectacular como el propio Teatro Griego son las vistas de Taormina, la costa y el Etna.

Callejuelas con encanto.

Callejuelas con encanto.

Tras la visita al teatro, lo que tocaba era recorrer la pequeña ciudad a pie, siguiendo el corso Umberto I y callejando un poco.

Prácticamente todas las callejuelas y rincones de Taormina tienen un encanto especial (obviando a los grupos de turistas). Además, hay también palacios e iglesias (Palacio Corvaja, Palacio de los Santo Stefano, Duomo di San Nicoló, Torre dell’Orologio, etc.) y un precioso jardín público, Villa Comunale, que tiene unas vistas magníficas de la costa.

.

Taormina_0014  Taormina_0015

– Paseando por las calles de Taormina.

Es difícil imaginarse, viendo la bonita escalinata, que el edificio del fondo es un Night Club y Cabaret (lo indica en el rótulo).

Es difícil imaginarse, viendo la bonita escalinata, que el edificio del fondo es un Night Club y Cabaret (lo indica en el rótulo).

Taormina_0019

La iglesia de San Giuseppe es barroca y casi kitsch.

La iglesia de San Giuseppe es barroca y casi kitsch.

Taormina_0018  Taormina_0024

– Piazza 9 Aprile, con la torre del reloj a la izquierda y la iglesia de San Giuseppe delante de las montañas, y catedral.

Después de recorrer longitudinalmente la ciudad, decidimos hacer caso a Reyero y, dado que comer en Taormina es muy caro, fuimos a la tienda Mamma Mía (via Bagnoli Croce, 50), donde nos hicieron unos riquísimos bocadillos con productos italianos. Compramos también unas cervezas y nos acercamos hasta los jardines públicos Villa Comunale, un lugar perfecto para hacer un picnic.

Taormina_0026

Dos vistas de Villa Comunale (jardines públicos).

Dos vistas de Villa Comunale (jardines públicos).

Después de comer habíamos decidido que tocaba playa, así que nos acercamos al teleférico, que nos bajó hasta la zona de la playa de Mazzarò e Isola Bella. Como en Palermo íbamos a ir a Mondello, una playa clásica, en Taormina elegimos Isola Bella, una isla casi unida a tierra por una lengua de arena (bueno, más bien pedregosa). La zona se vende como playa, pero es de piedras y hay muchas rocas. Aún así, en las hamacas de pago se está estupendamente y el agua, como en toda Sicilia, tiene un color impresionante.

Isola Bella, en Taormina.

Isola Bella, en Taormina.

Terminado el baño, había que volver sobre nuestros pasos: subir las escaleras de acceso a la playa, coger el funicular hacia Taormina y, por suerte, bajar las escaleras que llevan al aparcamiento Lumbi (a la salida del funicular, en un puestecito que había enfrente, nos bebimos un zumo de naranja recién exprimido y fresquito que nos supo a gloria).

Después de la "batalla".

Después de la «batalla».

Ya de nuevo en Catania, después de descansar un rato en el hotel, nos fuimos a cenar, dando antes un pequeño paseo por el centro. Llegamos hasta la Piazza Carlo Alberto, donde está la iglesia de Carmine y donde se celebra un típico mercado que, como podéis ver en la foto, estaba más que finalizado. Elegimos Metró (via Crociferì, 76), un restaurante del Slow Food Movement, que viene especialmente recomendado en la guía de Lonely Planet. Cenamos en la terraza (el interior me dio la impresión de que estaba cerrado) y, aunque todo estaba rico, el servicio fue lentísimo (no va de eso lo de «slow»), algunos platos de la carta no los tenían y la relación calidad/precio no fue de las mejores.

13_Sicilia_01_Catania_0041  13_Sicilia_01_Catania_0042

– Iglesia del Carmine, en la piazza Carlo Alberto (donde se celebra diariamente un mercado) y puesto de helados muy poco apetecible.

Así se terminaba nuestro segundo día en Sicilia (bueno, después de cenar nos tomamos unos riquísimos helados de palo en un local de via Etnea y unas copas en el bar del hotel). El domingo por la mañana pondríamos rumbo a Palermo.

Aunque no suelo colgar muchas fotos nuestras, aquí está la prueba de que sí que estuvimos en Sicilia (Cristina y Fernando durante la visita al Teatro Griego).

Aunque no suelo colgar muchas fotos nuestras, aquí está la prueba de que sí que estuvimos en Sicilia (Cristina y Fernando durante la visita al Teatro Griego).

Comparte esta entrada:

  • Twitter
  • Facebook

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

Otra semana en Sicilia – Catania (Parte 1)

07 miércoles Ago 2013

Posted by Fito in Arquitectura, Arte, Fotografía, Ocio y cultura, Viajes y ciudades

≈ 10 comentarios

Etiquetas

Art, Arte, Catania, ciudades, Fotografía, Italia, photography, Sicilia, Travels, viajes

Aunque este año no íbamos a ir de vacaciones, al final pudieron más las ganas que la situación económica y decidimos pasar una semana en Sicilia. Como bien sabéis los que visitáis este blog, ya habíamos estado en Sicilia hace unos años y la experiencia había sido de las que no se olvidan (aquí tenéis la crónica del anterior viaje).

NOTA: Las fotos se pueden ver a mayor tamaño haciendo clic sobre ellas y muchos restaurantes, museos, etc., tienen enlace a su web haciendo clic sobre el nombre.

Plano de Catania. Están marcados los principales recorridos y puntos de interés.

Plano de Catania. Están marcados algunos de los recorridos y puntos de interés que comento en este diario-guía.

En esta ocasión queríamos ver sitios que nos habíamos dejado el viaje anterior por falta de tiempo y, por qué no, repetir alguno de los que más nos habían gustado. El itinerario fue: Catania, Taormina, Palermo, Siracusa, Mazarmemi, Modica, Ragusa y, de nuevo, Catania.

Palacio de los Elefantes y fuente del Elefante, en la plaza de la Catedral.

Palacio de los Elefantes y fuente del Elefante, en la plaza de la Catedral.

El 19 de julio a primera hora de la mañana, con Iberia, pusimos rumbo a Catania. Entre que recogimos el coche de alquiler y esperamos por la maleta, llegamos a la ciudad sobre la una, así que decidimos ir directamente al Mercado de la Pescheria (la otra ocasión en que fuimos a Catania, también llegamos casi a la hora de cierre del mercado). Como Cristina no conocía la ciudad, dimos una vuelta, antes de comer, por la Plaza de la Catedral y alrededores (Catedral –como casi todas las iglesias de Catania, dedicada a Santa Ágata–, Badia di Santa Agata, Palacio de los Elefantes, fuente del Amenano, fuente del Elefante –símbolo de Catania–, etc.).

13_Sicilia_01_Catania_0003  13_Sicilia_01_Catania_0004

– La fuente del Amenano, del siglo XIX, a la entrada de la piazza Benedetto, donde comienza la Pescheria.

Para comer, aunque habíamos pensado en La Paglia (uno de nuestros favoritos de la anterior, y muy corta, visita), decidimos ir a la Osteria Antica Marina, que también está en la Pescheria (en vía Pardo, 29). No se come nada mal, pero no nos pareció nada del otro mundo y es un poco más caro que La Paglia.

13_Sicilia_01_Catania_0005  13_Sicilia_01_Catania_0006

– El mercado de la Pescheria es una de las visitas imprescindibles en Catania.

Tras el almuerzo, nos dirigimos al hotel. El NH Bellini no está en el centro histórico, pero está magníficamente situado, tiene parking, las habitaciones están como nuevas, el baño está muy bien y los desayunos son de los que merecen la pena. Descansamos un rato en la habitación del hotel y, ya atardeciendo, salimos a pasear hasta el casco histórico y a cenar.

Recorrimos el viale XX Setembre y doblamos en via Etnea, la arteria comercial principal de Catania. La primera parada fue en los bonitos jardines Villa Bellini, que son casi continuación del Jardín Botánico.

Entrada a los jardines Villa Bellini por la via Etnea.

Entrada a los jardines Villa Bellini por la via Etnea.

13_Sicilia_01_Catania_0025

La autoescuela.

Después seguimos bajando la vía Etnea hasta el Anfiteatro Romano, donde también está la iglesia de Santa Agata alla Fornace. No pudimos entrar porque había una boda –y cualquiera le decía algo a los dos que vigilaban la puerta de acceso–. Desde allí seguimos hasta Santa Agata al Carcere y subimos una escalinata hasta la preciosa Facultad de Jurisprudencia, que está justo al final de la via Crociferi (una de las calles de Catania que hay que patear obligatoriamente). Compramos unas botellas de agua en la Universidad (la cafetería era muy barata, pero no vendían nada con alcohol) y seguimos el paseo por vía Crociferi, pasando por San Camillo, San Benedetto, San Giuliano, San Francesco Borgia, Badia Grande y por algún comercio curioso (como la autoescuela que podéis ver en la foto –el dueño se puso las gafas de sol antes de permitirme hacerla–).

Los bailarines.

Los bailarines.

También nos encontramos a un par de chicos que, en la puerta de una iglesia, estaban ensayando un baile (Catania es de las ciudades más abiertas de Sicilia de cara a los gays, pero aún así, chocaba enormemente verles de aquella manera y en aquel lugar).

.

Paseando por las calles de Sicilia, parece que el tiempo se detuvo hace décadas. Al fondo, Santa Agata al Carcere.

Paseando por las calles de Sicilia, parece que el tiempo se detuvo hace décadas. Al fondo, Santa Agata al Carcere.

13_Sicilia_01_Catania_0021  13_Sicilia_01_Catania_0022

– Terraza y escalinatas de acceso a la Facultad de Jurisprudencia.

13_Sicilia_01_Catania_0026  13_Sicilia_01_Catania_0028

– Detalles de la fachada de San Giuliano y verja de la entrada de la Badia Grande.

Iglesia de Santa Agata alla Fornace, "cerrada por boda".

Iglesia de Santa Agata alla Fornace, «cerrada por boda».

Continuamos el recorrido hacia la plaza de la Catedral y retomamos via Etnea (Universidad, Palacio Sangiuliano, Collegiata), para doblar después por via Antonio di Sangiuliano hasta llegar a la plaza Bellini, donde se halla el Teatro Bellini (inaugurado el 31 de mayo de 1880 con la representación de Norma). Allí paramos a tomarnos unas cervezas, antes de ir a cenar.

13_Sicilia_01_Catania_0030  13_Sicilia_01_Catania_0032

– Exterior e interior de la catedral de Catania.

13_Sicilia_01_Catania_0034  13_Sicilia_01_Catania_0035

– Badia di Santa Agata (en un lateral de la catedral) y palacio de la Universidad (en via Etnea).

Patio de entrada del palacio San Giuliano (1745), obra de Vaccarini.

Patio de entrada del palacio San Giuliano (1745), obra de Vaccarini.

13_Sicilia_01_Catania_0037  13_Sicilia_01_Catania_0038

– Palacio de la Universidad visto desde el interior del palacio Sangiuliano  Collegiata (obra de Stefano Ittar).

Teatro Bellini (1880), obra de Carlo Sada.

Teatro Bellini (1880), obra de Carlo Sada.

Cenamos en la terraza de la Pizzeria Via Coppola (via Coppola, 39, muy cerca de la plaza Bellini). Las pizzas eran grandes y ricas –y baratas–, aunque inferiores a las que comimos la otra vez en Trapani o a las que íbamos a comer un par de días después en Palermo (por cierto, lo que no se os ocurra pedir aquí es el vino de la casa; es malo, malo, malo).

Y tras la cena, ya sólo quedaba el camino de vuelta al hotel después de un día intenso y muy caluroso (algo que continuó durante todo el viaje). El sábado por la mañana nos íbamos a pasar el día a Taormina. Al atardecer volveríamos a Catania, ciudad en la que también pasaríamos la última tarde-noche del viaje.

NOTA: Muchas otras cosas interesantes de Catania las he comentado en la entrada del viaje anterior o las comentaré en otras entradas de este viaje.

La fuente del Elefante, símbolo de Catania (su aspecto actual se debe al proyecto de Vaccarini de 1736, aunque sus elementos son más antiguos).

La fuente del Elefante, símbolo de Catania (su aspecto actual se debe al proyecto de Vaccarini de 1736, aunque sus elementos son más antiguos).

Comparte esta entrada:

  • Twitter
  • Facebook

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

Una semana en Sicilia (parte 5 y última)

02 jueves Sep 2010

Posted by Fito in Arquitectura, Arte, Fotografía, Ocio y cultura, Viajes y ciudades

≈ 12 comentarios

Etiquetas

Cefalú, Cities, ciudades, Fotografía, Italia, Monreale, photography, Sicilia, Sicily, Trapani, Travel, Turismo, viajes

Cefalú

Vista de la ciudad de Cefalú

Cefalú

Un niño en el puerto de Cefalú

El viernes, después de la visita al Castillo Maniace de Siracusa, emprendimos viaje a Cefalú, una pequeña localidad en la provincia de Palermo.

Cefalú es un precioso pueblo, muy turístico, que está delimitado por el mar y por una roca con forma de cabeza (de donde le viene el nombre). Por cierto: creo que es donde se rodó Cinema Paradiso.

Santa Maria della Catena Iglesia del Purgatorio Iglesia del Purgatorio

Santa Maria della Catena e iglesia del Purgatorio

Puerto de Cafalú Toldos

Bajando por las calles que dan al mar: vista del puerto y valcones con toldos a rayas.

Cefalú

Vista de Cefalú

El calor era casi insoportable, pero pasear por el puerto y la playa, por sus calles angostas y coloreadas por los toldos y toallas de los balcones, etc., merece siempre la pena.

Tras un primer paseo de reconocimiento (vimos algunas iglesias, pasamos por delante de la preciosa catedral, …), nos dirigimos a la Trattoria La Botte (via Veterani, 6), donde comí un excelente cuscús con pescado (aunque la comida es bastante buena, el calor en el local era insufrible –tenían el aire acondicionado al mínimo y no quisieron subirlo–, el servicio fue lentísimo y el precio algo alto). Después de comer, bajamos al puerto y dimos un paseo por el centro del pueblo, para dirigirnos finalmente a la plaza de la catedral, flanqueada por el palacio episcopal y el palacio Piraino, y protegida por la roca que delimita el pueblo.

Vista de Cefalú Vista de Cefalú

Vistas de Cefalú

Catedral de Cefalú

Catedral de Cefalú

Catedral de Cefalú Catedral de Cefalú Catedral de Cefalú

Catedral de Cefalú

La fachada de la catedral tiene dos torres que le dan un aire más de fortaleza que de templo. El interior, precioso, tiene mosaicos bizantinos y está presidido por un espléndido Cristo Pantocrátor (mediados del s. XII). Se divide en tres naves separadas por 16 columnas tomadas de edificios de la antigüedad, que sostienen una serie de arcos apuntados. Las paredes laterales están cubiertas de mosaicos de mediados del s. XIII.

Catedral de Cefalú

Cristo Poantocrátor. Catedral de Cefalú

Palacio episcopal Puesto de fruta

Palacio episcopal y puesto de fruta en Cefalú.

Fuente del Tritón

Piazza Vittorio Emanuele. Fuente del Tritón.

Una vez terminada la visita e Cefalú, seguimos el viaje camino de Palermo. El caos que había a la entrada de la ciudad (además era viernes) nos disuadió de parar allí (queda para el siguiente viaje a la isla) y decidimos continuar hasta la cercana población de Monreale.

Un antiguo refrán siciliano dice que «quien va a Palermo y no ve Monreale, va asno y vuelve borrico«. Y es verdad que no tiene perdón perderse una de las catedrales más impresionantes que he visto. En el centro del pueblo está la piazza Vittorio Emanuele, con la fuente del Tritón en su centro; y allí se encuentra la catedral, con su fachada mirando a la piazza Guillermo II.

Ábside de la catedral de Monreal Torre de la catedral de Monreale

Ábside y torre de la catedral de Monreale.

Catedral de Monreale Catedral de Monreale Catedral de Monreale

Interior de la catedral de Monreale.

Catedral de Monreale

Catedral de Monreale

Catedral de Monreale Catedral de Monreale

Interior de la catedral de Monreale.

Catedral de Monreale

Fachada de la catedral de Monreale

La catedral, ejemplo del arte normando en Sicilia, es una síntesis de elementos clásicos, nórdicos, árabes y bizantinos. Los osaicos del interior del templo son apabullantes y uno se podría pasar horas admirándolos. Pero no se puede ver la catedral por dentro y no dar un rodeo a la misma para ver los ábsides, ni dejar de entrar en su claustro del siglo XII (la única zona de pago): sus 228 columnas de mármol pareadas –alternando las lisas con las decoradas con mosaicos–, los maravillosos capiteles, la preciosa fuente rodeada por el «chiostrino», etc., hacen que sea una visita imprescindible.

Claustro Claustro

Claustro Claustro Fuente del claustro

Claustro de la catedral de Monreale: detalles de las columnas, fuente, etc.

Detalle de capitel. Claustro de la catedral de Monreale.

Candados

Una tradición romana.

Terminada la visita a Monreale, y después de habermos tomado un refresco en una terraza de la plaza de la catedral, continuamos el viaje hasta el punto de destino: Trapani.

Como ya era tarde, nos fuimos a cenar de nuevo a Pizza Calvino y después dimos un agradable paseo por el centro de la ciudad y por el paseo marítimo.

En barco Castello della Colombaia

Navegando rumbo a Lévanzo y vista del Castello della Colombaia.

NavegandoEl sábado lo dedicamos a la navegación. Terence, un inglés que tiene un bonito barco de vela y que lleva más de un año viviendo en Trapani con su hijo (en su barco), nos llevó hasta la isla de Lévanzo (la más agreste de las islas Égades).

Pasamos el día bañándonos en altamar, en unas aguas con un azul impresionante. A medidodía, Terence nos preparó la comida en el barco (una ensalada, un risoto y un poco de fruta). Después nos dimos un último chapuzón y pusimos rumbo a Trapani. La vuelta fue algo accidentada porque el mar estaba muy picado (preguntadle a Fernando qué tal lo pasó).

Por la tarde aproveché para ver el centro de Trapani a fondo: la iglesia del Purgatorio, el Palacio del Senado, la torre del Reloj, la catedral de San Lorenzo, la Iglesia del Colegio, el mercado de pescado, la torre de Ligny, etc.

Palacio Senatorial Iglesia del Purgatorio

Palacio del Senado e iglesia del Purgatorio.

La iglesia del Purgatorio (s. XVIII), obra del arquitecto Pietro Castro, guarda en su interior 20 grupos de estatuas que representan la Pasión de Cristo y que utizan para la famosa procesión de Viernes Santo, de la Semana Santa de Trapani.

Paso de Semana Santa Torre del RELOJ

Paso de Semana Santa (iglesia del Purgatorio) y Torre del Reloj.

El palacio del Senado (1696), junto a la torre del Reloj (s. XIII) –sobre la Porta Oscura, una de las antiguas entradas de la ciudad–, preside la via Vittorio Emanuele, la calle principal de la época catalana.

La iglesia del Colegio (siglo XVIII) –una de las muestras de arte de estilo barroco más impresionantes de Trapani– tiene en el altar mayor un relieve de mármol de la Inmaculada, obra maestra de Ignazio Marabitti.

Iglesia del COLEGIO Iglesia del Colegio Iglesia del COLEGIO

Iglesia del COLEGIO Iglesia del COLEGIO

Iglesia del Colegio (fachada, altar mayor, sacristía, etc.).

La catedral de San Lorenzo fue levantada en 1635, sobre otro templo, y tiene una fachada y un interior de estilo barroco.

Catedral de Trapani Catedral de Trapani

Catedral de Trapani Catedral de Trapani Catedral de Trapani

Catedral de San Lorenzo (Trapani)

Atardecer en TRAPANI

Atardecer en Trapani.

Mercado del pescado

Mercado del pescado (Trapani)

Piazza Garibaldi Puesto Palacio Berardo Ferro

Piazza Garibaldi y antiguo Gran Hotel, puesto típico de venta ambulante y patio del palacio Berardo Ferro.

Por la noche dimos un último paseo por la ciudad y cenamos, de nuevo, en la estupenda Trattoria Fontana –tomé, quizá, los langostinos más ricos que he probado nunca–; allí conocimos a una familia catalana encantadora: como estoy trabajando actualmente en Barcelona, se ofrecieron a enseñarnos la ciudad y los locales más interesantes. Ella trabaja en El Mundo Deportivo y, según me han comentado mis compañeros de trabajo, sale en tertulias deportivas de TV3 y es un personaje conocido en la ciudad.

Mozia

Embarcadero, junto a la isla de Mozia.

Salinas

Salinas

Y ya sólo quedaba la mañana del domingo. Como está muy cerca del aeropuerto, nos acercamos a Mozia (a la laguna donde está la isla de San Leo) y a las salinas y Reserva Natural dello Stagnone (muy cerca de Marsala). Las salinas las comenzaron a explotar los fenicios, aprovechando las aguas bajas y tranquilas del lugar. Es una preciosa para recorrer, fundamentalmente, al atardecer. Aún quedan en pie tres molinos, aunque la actividad cada día es menor y se está convirtiendo en una atracción meramente turística.

Salinas

Salinas y Reserva Natural dello Stagnone

Después de la visita a las salinas, nos pusimos camino del aeropuerto para coger el avión que nos traería de nuevo a Madrid. No sé cuándo será, pero seguro que volveremos Sicilia (¡nos queda tanto que ver!).

Comparte esta entrada:

  • Twitter
  • Facebook

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

Una semana en Sicilia (parte 4)

22 domingo Ago 2010

Posted by Fito in Arquitectura, Arte, Fotografía, Ocio y cultura, Viajes y ciudades

≈ 11 comentarios

Etiquetas

Art, Ciudades. Fotografía, Noto, Ortigia, photography, Sicilia, Sicily, Siracusa, Travel, viajes

El miércoles, después de comer en Catania y hacer una breve visita a la ciudad, continuamos el viaje a Siracusa, donde íbamos a pasar los próximos dos días.

Siracusa

En Ortigia, casi todas las callejuelas acaban en el mar.

Fuente plaza Archimede

Detalle de la fuente de la plaza Archimede

La entrada a la ciudad fue caótica debido a un accidente (tal y como conducen, es un milagro que no haya más), pero nada más cruzar uno de los puentes de acceso a la isla de Ortigia, nos dimos cuenta de que estábamos en una ciudad que nos iba a ofrecer los mejores momentos del viaje.

Miguel Reyero dice en su libro sobre Sicilia que «es difícil, para quien ama las ciudades hermosas, agradables y proporcionadas, ser objetivo cuando se describe Siracusa» y que «de la maravillosa isla de Ortigia, en la que se agrupa la ciudad griega, la medieval y la barroca, uno no encuentra el momento de irse y, cuando lo hace, siempre desea volver».

P.D.: Me ha dejado un mensaje en el blog en el que me dice que espera tener preparada una nueva edición de su guía de Sicilia antes de fin de año, así que ya sabéis una de las cosas que podéis regalar esta próxima Navidad.

Via Lungomare di Levante Hotel Gutkowski Hotel Gutkowski

El hotel Gutkoswski (el edificio azul) en la via Lungomare di Levante, el edificio contiguo (con más habitaciones, terraza, trattoria y una foto de la sala de desayuno.

Templo de Apolo

Templo de Apolo

El hotel Gutkowski, recomendación de Ernesto, son dos pequeños edificios antiguos (restaurados) frente al mar, con unas habitaciones minimalistas, pero muy bien decoradas, amplias, llenas de luz, y con preciosas estancias para la lectura, el desayuno, etc. (también tiene una terraza y, desde hace pocos meses, una trattoría).

En Siracusa, aparte del Parque Arquelógico, lo más interesante está en la isla de Ortigia (Catedral, Fuente Aretusa, Palacio Bellomo, Castillo Maniace, Templo de Apolo, etc.).

En nuestra toma de contacto con la isla, dimos un paseo por las principales calles –la zona del Templo de Apolo, la plaza Archimede, la plaza del Duomo, etc.– y terminamos junto al Castillo Maniace, cenando muy bien en la terraza de la Trattoria Taberna Sveva (Piazza Federico di Svevia, 1). Después de cenar, regresamos al hotel por la via Giudecca, la Piazza S. Giuseppe, etc., y paramos a tomar un café freddo en una pastelería de la via Matteotti.

Piazza del Duomo

Piazza del Duomo. Ortigia (Siracusa)

Catedralde Siracusa Catedral de Siracusa

Catedral de Siracusa Catedral de Siracusa

Catedral de Sicilia, con fachada de Ignacio Marabitti (1746), que sustituye a la destruida por el terremoto de 1693.

Catedral de Siracusa Palacio Beneventano del Bosco

Catedral, Palacio Senatorial e iglesia Santa Lucia alla Badia, y detalle del interior del Palacio Beneventano del Bosco. Piazza del Duomo. Ortigia. Siracusa.

Santa Lucia alla Badia Montevergine

Santa Lucia alla Badia y Montevergine.

Vista nocturnaLa mañana del jueves la pasamos en la playa, aunque antes dimos una pequeña vuelta por la ciudad para ver el interior de la Catedral, la fuente Aretusa y un cuadro de Caravaggio que está expuesto en Santa Lucia alla Badia. Fuimos a la Masseria sul Mare (strada statale 115, Siracusa – Noto, km 391,600), un lugar de agroturismo donde comimos muy bien (lo que ellos quisieron) y desde donde accedimos a la playa Pineta del Gelsomineto (tiene otra entrada antes de la Masseria, pero hay que pagar el parking, y allí nos dieron hasta una sombrilla y pudimos utilizar después la ducha).

Aunque hay alguna playa quizá más bonita yendo hacia el sur por la costa, ésta es muy tranquila y tampoco tiene nada que envidiar a las otras.

Playa

Una de las fantásticas playas que hay cerca de Siracusa.

Vista de Noto desde Santa Chiara

Vista de Noto desde Santa Chiara

Por la tarde nos acercamos a Noto, un precioso pueblo barroco (sufrió un terremoto en 1990 y otro en 1996 y han sido restaurados la mayoría de los edificios importantes, incluyendo la Catedral) que se desarrolla alrededor de su calle principal (corso Vittorio Emanuele) y que es uno de los lugares imprescindibles de Sicilia (me han dicho que Ragusa es otro pueblo que uno no puede perderse, pero en una semana no da tiempo a todo).

Porta Reale San Francesco Santa Chiara

Porta Reale, San Francesco y Santa Chiara.

Piazza dell'Immacolata

Piazza dell'Immacolata (iglesia de San Francesco y El Salvatore)

San Francesco Santa Chiara Santa Chiara

Interior de San Francesco y Santa Chiara.

Catedral de Noto Catedral de Noto

Vistas de la catedral, desde Santa Chiara.

Iglesia de NotoLo más interesante para ver en Noto es: la Porta Reale (entrada al corso Vittorio Emanuele), la piazza della Inmacolata (que, sobre la escalinata obra de Vicenzo Sinatra, preside la iglesia de San Francesco a l’Immacolata), la iglesia de Santa Chiara (muy bonita iglesia barroca con unas vistas espectaculares de la ciudad desde su campanario), el conjunto monumental de la piazza del Municipio (la catedral –del siglo XVIII, con una fachada impresionante–, el palacio de San Alfano, el palacio episcopal y el palacio Ducezio –construido en 1746 y proyctado por Vicenzo Sinatra; actual sede del Ayuntamiento), el neoclásico Teatro Comunal, el palacio Nicolaci Villadorata (de 1640, obra de Rosario Gagliardi, con unas impresionantes ménsulas barrocas sujetando los balcones y un precioso interior) y la iglesia de Montevergini (que cierra la parte superior de via Nicolaci con su fachada cóncava con dos torres).

Catedral de Noto

Catedral de Noto

Palacio Ducezio

Palacio Ducezio, actual sede del Ayuntamiento de Noto.

San Carlo Montevergine

Iglesias de San Carlo y Montevergine.

Palacio Nicolati Villadorata Palacio Nicolati Villadorata

Detalle de un balcón y parte trasera del Palacio Nicolaci Villadorata.

Palacio Nicolati Villadorata Palacio Nicolati Villadorata Palacio Nicolati Villadorata

Salones del palacio Nicolati Villadorata.

Fernando en Noto

Fernando, dando buena cuenta de los cannoli y helados de Noto.

Y después de ver Noto, lo mejor es sentarse en la terraza del Caffé Sicilia (corso Vittorio Emanuele, 125) y disfrutar de, quizá, los mejores helados y granizados que haya probado.

El granizado de almendra es excelente, los helados son riquísimos (sólo hay que preguntarle a Fernando por el de chocolate) y los cannoli (canutos rellenos de ricotta –requesón– o chocolate) son espectaculares.

Teatro Comunale Teatro Comunale

Teatro Comunale Teatro Comunale

Teatro Comunale

Teatro Comunale de Noto

Por la noche, ya de vuelta en Siracusa, dimos un paseo por la isla (uno nunca se cansa de pasear por Ortigia y cada vez se descubren nuevos rincones con algo especial) y cenamos pasta es un local barato y muy bueno (en via Cavour, 28) que se llama Sicilia in Távola.

Calles de Siracusa Portal de Siracusa Niña en balcón

Paseando por las calles de Siracusa.

Por las calles de Siracusa Por las calles de Siracusa

Por las calles de SIracusa Por las calles de Siracusa

Fernando en el paseo marítimo de Siracusa Siracusa

Paseando por las calles de Siracusa.

Fuente Aretusa Jardín junto al acuario

Vista desde la fuente Aretusa (con sus impresionantes papiros) y jardín a la entrada del acuario.

Fuente Aretusa

Fuente Aretusa

San Benedetto San Benedetto

Iglesia de San Benedetto.

Porta Marina Foro Italico Palacio Blanco

Piazza Marina Foro Itálico Siracusa

Porta Marina, Foro Itálico, Palacio Blanco y otras vistas de la isla.

Castillo de Maniace

Castillo Maniace

El viernes por la mañana nos íbamos de Siracusa, pero decidimos aprovechar la mañana para visitar el Castillo Maniace.

Es una fortaleza que fue construida en 1239 por Federico II sobre un fuerte levantado por el comandante bizantino Giorgio Maniace en 1038.

.

Castillo de Maniace

Castillo Maniace

Castillo Maniace Castillo Maniace

Castillo Maniace Castillo Maniace

Castillo Maniace

Castillo Maniace

Después de la visita al castillo, nos pusimos rumbo a Trapani, con escalas en el precioso pueblo de Cefalú y en Monreale (su catedral es una de las visitas imprescindibles), pero eso será parte de la quinta entrega del diario del viaje a Sicilia.

En moto por la piazza del Duomo

P.D.: Haciendo clic en las fotos, se abren a mayor tamaño en una nueva ventana.

Comparte esta entrada:

  • Twitter
  • Facebook

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

Una semana en Sicilia (parte 3)

15 domingo Ago 2010

Posted by Fito in Arquitectura, Arte, Fotografía, Ocio y cultura, Viajes y ciudades

≈ 12 comentarios

Etiquetas

Catania, ciudades, Enna, Fotografía, Italia, photography, Sicilia, viajes, Villa Romana de Casale

Calascibetta

Vista de Calascibetta, desde Enna

El miércoles nos levantamos temprano para llegar antes que las hordas de turistas a la Villa Romana de Casale (Patrimonio de la Humanidad). En la entrada –eran las 9 de la mañana–, había un siciliano mayor, gordete, con su sombrero y su puro, que nos hizo señas para que nos acercáramos. Cuando estuvimos a su altura, nos dijo en italiano que ese día no abrirían hasta las 3 de la tarde. No nos dio ninguna explicación. Como no podíamos pasar el día tirados, esperando a que abrieran la villa para ver los mosaicos, decidimos, ya que nos quedaba de camino, ir a ver Enna.

Castillo de Lombardía Nosotros en Enna Vista de Enna

Vitsta del interior del castillo, Fernando y yo en la torre Pisana y vista de Enna desde el Castillo.

Esquelas

Esquelas en una calle de Enna

Enna es un pueblo que se levanta sobre un monte y desde el que, en días despejados, se puede ver casi toda Sicilia (vale, he exagerado un poco).

Lo más interesante de la ciudad es el Castillo de Lombardía y la torre Pisana, la Catedral, la Torre de Federico II y varias iglesias distribuidas por la via Roma.

Torre Pisana Torre Pisana

Torre Pisana (Castillo de Lombardía)

El Castillo de Lombardía fue uno de los principales puntos de defensa de la Sicilia medieval. De origen árabe, fue restaurado por los normandos y Federico II, en el siglo XII, levantó un complejo amurallado con torreones, de los que queda especialmente bien conservada la Torre Pisana. Delante del castillo, convertido en un mirador, están las ruinas de lo que fue el Templo de Ceres.

Boda en la catedral de Enna Catedral de Enna. Interior

Interior de la catedral de Enna, durante la celebración de una boda.

Catedral de Enna Santa Chiara Santa Chiara

Fachada de la Catedral de Enna y fachada e interior de Santa Chiara.

San Giovanni

Interior de San Giovanni

El paseo que dimos desde el castillo hasta el centro de la ciudad nos permitió ver algunos de los edificios más interesantes de la ciudad, como la Catedral (levantada en 1307 por la reina Leonor, devastada por un incendio y reconstruida posteriormente en formas renacentistas), la iglesia de San Giovanni o la de Santa Chiara (actualmente es un memorial de los caídos en las dos guerras mundiales).

Santa Chiara Santa Chiara La colada del cura

Interior de Santa Chiara y «la colada del cura».

Fuente del Amenano

Fuente del Amenano

Después del agradable paseo por Enna, nos pusimos de nuevo en ruta, camino de Siracusa. La siguiente parada, aprovechando que se acercaba la hora de la comida, iba a ser Catania.

Catania es la segunda ciudad de Sicilia y, aunque tiene fama de insegura y ha crecido bastante mal, su casco histórico está muy bien cuidado (fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 2002).

Decidimos comenzar la visita por la Pescheria (estaban a punto de cerrar, recoger y hacer limpieza), mercado histórico heredero de los zocos islámicos, donde se mezclan ruidos, olores, colores, … Aprovechamos para comer en la Trattoría La Paglia (Via Pardo, 23), que está en el mismo mercado del pescado, y disfrutamos de unos fantásticos espaguetis vongole (qué almejas más ricas) y de un atún que estaba exquisito.

Mercado del pescado de Catania

Los vendedores empiezan a recoger los puestos del mercado de pescado.

Catedral de Catania Catedral de Catania

Catedral de Catania y fuente del Elefante.

Catedral de Catania Catedral de Catania Catedral de Catania

Interior de la catedral de Catania.

Catedral de Catania

Capilla de la Catedral de Catania.

Badia di Santa Agueda

Badia di Santa Agata

Después de comer, dimos el paseo turístico.

Empezamos por la Piazza del Duomo, en la que se puede ver la Catedral (erigida entre 1078 y 1093 y reconstruida en varios siglos –fachada barroca de Vaccarini, cúpula del siglo XVIII), el Palacio de los Elefantes (sede del Ayuntamiento), varios palacios, la fuente Amenano (se alimenta del río que le da nombre) y la fuente del Elefante (símbolo de Catania).

Casi al lado de la Catedral está la preciosa Badia di Santa Agata (obra maestra de Vaccarini). Seguimos por la Plaza de la Universidad y recorrimos la Via Vittorio Emanuele II y la Via Teatro Greco, donde se encuentra el Teatro Romano y el odeón.

Fuente del Elefante Palacio de la Universidad

Palacio de los Elefantes (Ayuntamiento), fuente del Elefante y Palacio de la Universidad.

San Francesco Teatro romano

Iglesia de San Francesco y corredor interior del Teatro Romano de Catania.

Teatro romano Teatro romano

Teatro romano de Catania.

Monasterio de los benedictinos

Monasterio de los benedictinos

Por último nos acercamos hasta San Nicoló (la iglesia se inició en 1687 y su fachada permanece inconclusa) y el convento de los benedictinos (el tercero más grande de Europa y actualmente sede de la Facultad de Filosofía y Letras), cuyo edificio actual, que sustituyó al devastado por el terremoto, es de 1703 e intervinieron en él arquitectos de la talla de Amato, Benedetto, Battaglia o Vaccarini.

Los balcones de su fachada son espectaculares, así como la decoración de la entrada y los claustros (aunque al utilizarse como Universidad, ha perdido parte de su encanto).

San Nicoló Monasterio de los benedictinos. Balcón. Monasterio de los benedictinos

San Nicoló y detalles del monasterio de los benedictinos (balcón e interior).

Terminada la corta visita a Catania, cogimos el coche hacia Siracusa, destino en el que pasaríamos un par de días y que será la parte central de la próxima entrega del diario del viaje.

Monasterio de los benedictinos

Escaleras de entrada al monasterior de los benedictinos (Catania).

Comparte esta entrada:

  • Twitter
  • Facebook

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

Una semana en Sicilia (parte 2)

11 miércoles Ago 2010

Posted by Fito in Arquitectura, Arte, Fotografía, Ocio y cultura, Personal, Viajes y ciudades

≈ 6 comentarios

Etiquetas

ciudades, Fotografía, photography, Piazza Armerina, Scala del Turchi, Selinunte, Sicilia, Travel, viajes

Templo E

Templo E (detalle). Zona arqueológica de Selinunte.

Vista de Selinunte

Zona arqueológica de Selinunte

El martes, después de pasar por el aeropuerto a cambiar el coche en Hertz (el aire acondicionado no funcionaba), nos pusimos rumbo a Selinunte, un enclave arqueológico cercano al mar (a 71 km de Trapani, hacia el sur), de los más importantes del Mediterráneo y el más extenso de la civilización griega.

Las dos zonas más interesantes son la de los templos orientales y la Acrópolis, que se desarrolla en una explanada en pendiente sobre el mar y donde se pueden ver vestigios de varios templos.

Templo E Templo E

Templo E Templos de Selinunte

Templos orientales del parque arqueológico de Selinunte.

La Acrópolis

La Acrópolis. Selinunte

Aunque me gustó mucho, tengo que reconocer que no se puede ir en julio o agosto sin gorra ni cantimplora: casi nos deshidratamos. La experiencia fue tan mala que decidimos no ir a Agrigento (me habían recomendado ver el Valle de los Templos) y aprovechar el resto del día en una playa espectacular.

Comimos en un restaurante cercano a Selinunte y nos pusimos rumbo a la Scala dei Turchi.

Scala dei Turchi

Vista de la impresionante Scala dei Turchi.

La Scala dei Turchi –está al lado de Realmonte, a 10 km de Agrigento– es una preciosa playa cuya característica principal es un fantástico acantilado blanco que, al atardecer, se tiñe de rosa. Arena tiene poca y el acceso a algunas calas es complicado, pero el entorno es tan espectacular que merece la pena ir sólo a verlo (aunque nosotros nos dimos un buen baño).

Scala dei Turchi Scala dei Turchi

Vistas de la Scala dei Turchi.

Piazza Armerina

Iglesia. Piazza Armerina

Después de la jornada playera, y mucho más relajados que por la mañana, nos dirigimos hacia Piazza Armerina, un pequeño pueblecito que queda muy cerca de la Villa Romana de Casale, nuestra primera visita planeada para el miércoles. Nos alojamos en el Ostello del Borgo, un antiguo monasterio reconvertido en albergue, muy básico y muy barato, pero con algún inconveniente: la ducha salía directamente de la pared al suelo del baño y un sumidero en el centro recogía el agua; y lo peor era una alfombrilla que debía de tener la mayor colección posible de organismos vivos –o muertos–, por la pinta que tenía.

Piazza Armerina. Duomo Ayuntamiento. Piazza Armerina

Vistas nocturnas de la Catedral, el Ayuntamiento y la iglesia de San Rocco, en Piazza Armerina.

Piazza Armerina

Vista general de Piazza Armerina, con el Duomo presidiendo el pueblo.

Cenamos, bastante bien (una especie de croquetas rellenas de mozzarella y otros productos típicos, y una pizza, acompañado todo por dos cervezas de 66 cl), en el Ristorante del Teatro, que está frente al Teatro Garibaldi. Después de cenar, dimos una vuelta por el pueblo y pasamos por la Catedral, el Ayuntamiento, la iglesia de San Rocco, etc.

El miércoles se presentaba muy interesante: Enna, Catania y, sobre todo, Siracusa. Pero eso ya es historia para la tercera parte.

Scala dei Turchi

Vista de la impresionante Scala dei Turchi.

Tweet

Comparte esta entrada:

  • Twitter
  • Facebook

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...
← Entradas anteriores
febrero 2023
L M X J V S D
 12345
6789101112
13141516171819
20212223242526
2728  
« Nov    

COMPRA el libro

EN EL FOSO

EN EL FOSO

DISCO DEL DÍA

DON'T EAT THE YELLOW SNOW

DISCO DEL DÍA

SUBURBAN LIVING

ALMOST PARADISE

Twitter de Adolfo

IN THE PIT / EN EL FOSO (photobook para iPad)

Error: Twitter no responde. Por favor, espera unos minutos y actualiza esta página.

Mi Twitter

Error: Twitter no responde. Por favor, espera unos minutos y actualiza esta página.

Posts Más Vistos

  • Una semana en Sicilia
  • Canciones para un atardecer
  • R.E.A.: Responsable la empresa anunciadora
  • Madrid desde la azotea del Círculo de Bellas Artes

Categorías

Comentarios recientes

ja gp en The Go-Betweens
TUMADRECALIENTE.COM en Antoni Marí – El vaso de…
TUMADREMUERTA en Antoni Marí – El vaso de…
TUMADRE en Antoni Marí – El vaso de…
BetitoWTFtusmuertos en Antoni Marí – El vaso de…

Etiquetas

Allo Darlin' Arcade Fire Arquitectura Arte Arthur Russell Beck Black Francis Bob Dylan Bruce Springsteen Christina Rosenvinge ciudades Clem Snide Compilations Concerts conciertos covers Cowboy Junkies cultura David Bowie Deerhunter Dinosaur Jr. Discos Edwyn Collins Eels Elvis Costello Fanfarlo Fotografía Frank Black Giant Sand Graham Parker Indienauta iPad Iron & Wine Lambchop Libros Literatura Lou Reed Luna madrid Morrissey music Música Nada Surf Neil Young New York Nick Lowe Nueva York parís Patti Smith Paul Weller photography Pixies Prince R.E.M. recopilaciones She & Him Sicilia Sonic Youth Stephen Malkmus Suzanne Vega Teatro The Magnetic Fields The National The Pains Of Being Pure At Heart the pixies The Raveonettes The Wedding Present Tindersticks Travel Travels venta versiones viajes Wilco Yo La Tengo

Archivos

  • noviembre 2018
  • junio 2018
  • febrero 2018
  • septiembre 2016
  • agosto 2016
  • julio 2016
  • febrero 2016
  • enero 2016
  • septiembre 2015
  • mayo 2015
  • marzo 2015
  • noviembre 2014
  • octubre 2014
  • septiembre 2014
  • agosto 2014
  • julio 2014
  • junio 2014
  • mayo 2014
  • abril 2014
  • marzo 2014
  • febrero 2014
  • enero 2014
  • diciembre 2013
  • noviembre 2013
  • septiembre 2013
  • agosto 2013
  • julio 2013
  • junio 2013
  • mayo 2013
  • abril 2013
  • marzo 2013
  • febrero 2013
  • enero 2013
  • diciembre 2012
  • noviembre 2012
  • octubre 2012
  • septiembre 2012
  • agosto 2012
  • julio 2012
  • junio 2012
  • mayo 2012
  • abril 2012
  • marzo 2012
  • febrero 2012
  • enero 2012
  • diciembre 2011
  • noviembre 2011
  • octubre 2011
  • septiembre 2011
  • agosto 2011
  • julio 2011
  • junio 2011
  • mayo 2011
  • abril 2011
  • marzo 2011
  • febrero 2011
  • enero 2011
  • diciembre 2010
  • noviembre 2010
  • octubre 2010
  • septiembre 2010
  • agosto 2010
  • julio 2010
  • junio 2010
  • mayo 2010
  • abril 2010
  • marzo 2010
  • febrero 2010
  • enero 2010
  • diciembre 2009
  • noviembre 2009
  • octubre 2009
  • septiembre 2009
  • agosto 2009
  • julio 2009
  • junio 2009
  • mayo 2009
  • abril 2009
  • marzo 2009
  • febrero 2009
  • enero 2009
  • diciembre 2008
  • noviembre 2008
  • octubre 2008
  • septiembre 2008
  • agosto 2008
  • julio 2008
  • junio 2008
  • mayo 2008
  • abril 2008
  • marzo 2008
  • febrero 2008

Aforismos

Oscar Wilde
Amarse a uno mismo es el comienzo de un idilio que dura toda la vida.

Oscar Wilde


Estadísticas del blog

  • 886.350 hits

Crea un blog o un sitio web gratuitos con WordPress.com.

  • Seguir Siguiendo
    • Blog de Adolfo
    • Únete a 132 seguidores más
    • ¿Ya tienes una cuenta de WordPress.com? Accede ahora.
    • Blog de Adolfo
    • Personalizar
    • Seguir Siguiendo
    • Regístrate
    • Acceder
    • Denunciar este contenido
    • Ver sitio web en el Lector
    • Gestionar las suscripciones
    • Contraer esta barra
 

Cargando comentarios...
 

    A %d blogueros les gusta esto: